Bullan las aguas de animales vivientes,
Y que sobre tu cabeza,
En el firmamento llamado cielo,
Te revoloteen los quetzales llenos de color.
Creare en tu mundo mounstros marinos,
Piratas perdidos y barcos a vapor.
Te contare de ellos cada noche,
Para que te duermas en cada letra.
Te arropare hasta el cuello cuando la luz se apague,
Y cuando el beso de tu madre te de un adios.
Así le digo a mis cuentos y mis letras,
Sean fecundas y multiplíquense .
Crean en el amor que existe del hombre,
Al germen de sus raíces.
Llenare los mares y la tierra,
De mi creación.